Porque soy un ángel caído del cielo, me escondo tras las nubes y
puedo ser observada en la vulnerabilidad de mi sueño... Dios sabe que no quise ser un ángel pero él me hizo serlo y yo solo dejo que mi naturaleza actúe dando pie a quien soy...
Una tortura que no debería definirse así sino todo lo contrario es un auténtico placer para tu cuerpo que te de vida orgásmica, un sufrimiento inyectable a tu alma.
Una tortura que no debería definirse así sino todo lo contrario es un auténtico placer para tu cuerpo que te de vida orgásmica, un sufrimiento inyectable a tu alma.
ResponderEliminarUn beso pecaminoso.
Tras torturarte... difícil va a ser sorprenderte.
ResponderEliminarA tus PIES
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ResponderEliminarDulce y bella tortura...
ResponderEliminarMuchos besos.
Flagelos de pasión, caricias que se dilatan en el tiempo de excitación, tortura de los sentidos abatidos y extenuados de pacer, apetecible tortura.
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