viernes, 6 de mayo de 2016

Una tarde de hotel




Amantes habituales en lugares inhabituales.

A mi me pone inventar, cambiar de escenario, improvisar.
Sabe diferente.
Una tarde entre semana, en temporada de otoño tomándote un pisco sour, con un hombre que me encanta. 

Me gusta darme estos lujos.
Se me enciende una chispa, la idea que me andaba por la cabeza toma forma y se convierte en un impulso imparable.

Un pequeño palacio de estilo modernista en el centro de la ciudad.
Habitación con jacuzzi, muchas almohadas blancas, un gran espejo.
Y sexo. Sexo en la cama, en el jacuzzi, en la pared a la luz de la noche, sexo en el baño rodeados de espejos, de nuevo en la cama..

Sentir que te desintegras de tanto placer.

Me gustan estos momentos que hacen que algunos días sean diferentes a los demás.

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